La convención perredeísta.
Reconozco que para mi se hace difícil
escribir de forma favorable hacia el Partido Revolucionario Dominicano dada mi
condición de militante por mas de 30 anos que fui del PRSC y mi arraigada
admiración por Joaquín Balaguer, lo natural era que criticara siempre al PRD,
pero ahora, ante el peligro real y casi inminente de que en este país solo
quede un partido político, el oficialista PLD, no puedo mas que pedir por la
solución a la crisis interna del PRD.
Lamentablemente el partido blanco
esta en una de sus acostumbradas crisis internas, dirigido por un hombre cuya
vocación autoritaria y manejo empresarial de la organización la están alejando
del sentimiento popular, algo peligroso a cerca de dos anos y medio de las
próximas elecciones.
La crisis del PRD carece de sentido
pues esta vez no se trata de dos liderazgos fuertes disputándose la supremacía
partidaria o la candidatura presidencial, sino de un hombre aferrado a la
presidencia del partido para tratar de obtener la candidatura presidencial a
toda costa, y de una mayoría partidaria que le adversa pero que esta
virtualmente atrapada entre las decisiones de un Tribunal Electoral
evidentemente manipulado.
No entiendo como la fuerza de la
mayoría se deja manejar y aplastar por una minoría, aunque esta tenga el favor
del poder, quizás sea hora de usar esa mayoría para obligar al presidente
del partido a convocar la Convención que renovaría los cuadros diligénciales de
la organización convocando a las masas perredeistas a protestar diariamente y
de manera multitudinaria frente a aquellos locales secuestrados por
la minoría hasta que las multitudes hagan entender al Ing. Vargas que es
impostergable la celebración del evento interno.
El Ing. Vargas Maldonado parece
creer que el tiempo y la disponibilidad de candidaturas congresionales y
municipales para repartir a quienes se plieguen a sus intereses pueden ser
factores a su favor, lo que no parece ver el empresario presidente del partido
blanco es que sin el favor de las masas perredeistas y de aquellos votantes
deseosos de un cambio de partido en la conducción del Estado no hay maniobra
que valga para coronar con éxito sus pretensiones, lo mas que puede lograr es
otra derrota vergonzosa que permita entronizar aun mas el control peledeista de
las instituciones del Estado.
Creo que Vargas Maldonado no
convocara la Convención perredeista mientras no se considere capaz de ganarla,
no importa si los Estatutos dicen otra cosa, para eso el tiene un león
protegiéndolo desde el zoológico donde se evacuan las decisiones electorales, a
menos que la mayoría perredeista se envalentone y exija la celebración del
evento protestando en cualquier escenario en que Vargas se presente.
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