Una propuesta de presupuesto sin
impuestos para el 2013.
Santo Domingo.˗ La Comisión Económica del
PRD propone que el gasto del 2013 se limite a $390 mil millones de pesos,
equivalentes a 15.6% del PIB. Significa aumentar el gasto en 17.4% respecto al
2011, que ascendió a $332 mil 126 millones de pesos, para que el gobierno pueda
cumplir con el 4% para el sector educación y cubrir otros compromisos con la
sociedad.
Nuestra propuesta implica una reducción
de $79 mil 024 millones de pesos en el gasto total respecto a lo que plantea el
gobierno para el 2013. Recomendamos reducir el gasto de capital en $19 mil 648
millones de pesos, para llevarlo a $80 mil millones en lugar de $99,648
millones como lo propone el gobierno. Reducir el gasto corriente de $59 mil 376
millones de pesos, de $369 mil 376 millones de pesos a $310 mil millones de
pesos. En este renglón el gobierno debe economizar $14 mil millones en sueldos
y salarios (nominillas principalmente), el monto de $12 mil millones en bienes
y servicios, en transferencias $10 mil millones, del subsidio a la CDEE el
monto de $13 mil millones y $10 mil millones procedentes de otros renglones del
gasto corriente.
La economía total en el gasto que estamos
recomendando representaría 3.2% del PIB, diferencia entre el presupuesto que
plantea el gobierno y el que recomienda la Comisión Económica del PRD. Una
economía que supera el ajuste vía impuestos de 1.9% del PIB que pretende el
gobierno para el 2013. Es decir, el gobierno no necesita nuevos impuestos para
financiar el presupuesto del 2013 y puede cerrar el año con un déficit
manejable.
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Por lo anterior, recomendamos que los
diputados del PRD rechacen el paquetazo tributario por innecesario, porque
aumenta el costo de la vida, reduce el salario de los trabajadores, disminuye
la producción y las actividades económicas, además de que aumenta la pobreza y
la desigualdad entre ricos y pobres. Recomendamos que se comprometan a discutir
con el gobierno, junto al PRD, empresarios y sociedad civil, una verdadera
reforma fiscal integral, que tenga como objetivo el aumento del ahorro público
y privado así como la inversión, que contribuyan a mejorar el bienestar del
pueblo y la competitividad de los productores nacionales. Esa iniciativa debe
dejarse para mediados del 2013, para que entre en vigencia en el 2014.
Orígenes del
Problema.
La credibilidad del presupuesto público
está en el suelo, la insolvencia que arrastra es el resultado de la política de
endeudamiento y gasto excesivos. El gobierno no ha tenido problema con los
ingresos, crecieron 104%, promediando 14.6% del PIB, el inconveniente ha sido
el gasto total, que creció 139%, promediando 17.75% del PIB, acumulando las
finanzas públicas un déficit de $398 mil 428 millones, todo en el periodo
2005-2012. Como consecuencia de la desastrosa gestión pública de Leonel
Fernández la deuda pública se multiplicó dos veces y media, hasta llegar a
US$26,500 millones, también aumento el servicio de la deuda, lo evidencia hasta
representar 45% de los ingresos tributarios en el Presupuesto 2012.
En el 2012 el gobierno está cerrando con
un déficit de caja salvaje de $156 mil millones de pesos, a pesar de que los
ingresos totales aumentaron 14%, pasando de $280 mil 457 millones de pesos en
el 2011 a
un estimado de $319 mil 693 millones de pesos en el 2012. Rompió todos
los records, el gasto aumento 40%, de $340 mil 876 millones de pesos en 2011 a un estimado de $475
mil 638 millones de pesos en 2012.
El gobierno de Danilo Medina pretende continuar
con el mismo derroche, porque basado en el mayor desastre fiscal que conozca la
historia económica dominicana, elaboró el presupuesto del 2013. Pretende
un gasto total de $469 mil 024 millones de pesos, equivalentes a 18.8% del PIB,
y un presupuesto total de $532 mil 638 millones de pesos (gasto total más
aplicaciones financieras), equivalentes a 21.4% del PIB. Es decir, el
presupuesto que terminará ejecutándose en el 2012 y el del 2013 son similares.
El gobierno de Danilo Medina convocó el
Consejo Económico y Social para que le apoyaran el parche tributario que
recauda adicionalmente $47 mil 297 millones de pesos, un ajuste de 1.9% del
PIB, en cuatro años la suma de $189 mil millones de pesos, un ajuste total de
7.6% del PIB. Un parche tributario que no toma en cuenta a la gente, contrario
a lo que ha dicho el Presidente Danilo Medina. Que deja de lado el hecho de que
República Dominicana es una de las cuatro primeras naciones de Latinoamérica y
El Caribe con mayores niveles de hambre, según el Índice Global del Hambre, que
exhibe altos niveles de pobreza al rondar el 40% de la población
dominicana y la indigencia un 10%, con una de la más elevada tasa de
desigualdad en la distribución del ingreso del mundo.
Aumenta la tasa del Itbis y amplía su base
para incluir café, azúcar, aceites y grasas comestibles, yogur, chocolate,cereales
y derivados, diferentes tipos de carnes, granos (habichuelas), plátanos, leche,
espaguetis, huevos, vegetales, entre otros que
integran la canasta básica familiar. Que sin importar que no se graven algunos
de los productos, de manera directa e indirecta afectarán el costo de la canasta básica, la que
aumentará entre 30% y 40%, es decir, que de $27 mil pesos oscilará entre $35 y
$38 mil pesos mensuales. Por la reducción del poder de compra del salario, se
espera que disminuya el consumo de la población, impactando negativamente en la
producción nacional, el empleo y la recaudación tributaria que se reducirá.
En cuanto a los sectores de clase media,
las nueve modificaciones a los
impuestos directos que debieron estar destinadas a mejorar la distribución del
ingreso, o si se quiere, a disminuir los niveles de desigualdad,
lamentablemente no será de esa manera. Más bien reducirán sus ingresos por la
mayor tributación por el uso de vehículos propios así como por el pago de
tributos por su condición de ahorrantes. Téngase presente que en gran medida
una cantidad significativa de envejecientes viven de sus ahorros, que durante
años de trabajo y sacrificio han acumulado.
A lo anterior se suma que el brazo
recaudatorio del Gobierno se extiende a los salones de belleza, pequeños bares
y restaurantes, a los que tienen un puesto de venta en el mercado, quienes
deberán tributar sumas específicas sobre sus operaciones. En resumen, el parche
tributario también tendrá un fuerte impacto sobre los estratos intermedios
ubicados entre el 20% más pobre y el 20% más rico de la población, afectando
directamente alrededor de 2,000,000 de hogares.
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