Por Bonaparte Gautreaux Piñeyro
¡Ay! de los países que no saben respetar
sus símbolos fundamentales.
La historia puede sufrir retrasos pero de manera inexorable camina hacia
adelante, aunque a veces parece recular. La historia no recula, reculamos los
hombres cuando no somos capaces de construir y leer el curso que debe llevar la
vida para que los pueblos disfruten de libertad y justicia.








