"El problema es que se prolongó en el tiempo bajo la creencia de que el presupuesto puede ser deficitario, porque nuestro problema ha sido de liquidez exclusivamente y no de insolvencia".

Con los ingresos recaudados por impuestos es como deben pagarse los intereses y demás gastos públicos. El principio comenzó a violarse en 2008, gastándose más de lo recaudado, aplicándose la política “contracíclica” o de “antiausteridad” apoyada en presupuesto desbalanceado.