Por Bonaparte Gautreaux
Piñeyro
Para 1966 Angel Liz,
Presidente de la Junta
Central Electoral anunció que se votaría con un documento
especial, con el propósito de evitar fraudes electorales.
Ese año, el profesor Juan
Bosch explicó, en varias charlas radiales, distintos modos de fraudes, no
recuerdo si habló de un camaján cubano llamado Santiago Rey Perna, reaccionario
de uña en el rabo, experto en fraudes, importado para trabajar en favor del
candidato Joaquín Balaguer.
Acudí a buscar el documento
electoral en una oficina instalada en el edificio del Ayuntamiento de la calle
El Conde esquina Arzobispo Meriño. Luego de esperar en una larga fila
durante tres horas, recibí el carnet.
Entonces era Secretario de
Bosch, le llevé un cálculo que relacionaba el tiempo de espera con el número de
electores y se necesitarían muchos meses de horas-hombre para cumplir con la
entrega del documento a cada ciudadano.
Bosch pronunció un discurso
donde desarrolló la idea de que se votaría con la cédula vieja debido a que la
entrega del documento electoral sería imposible, por falta de tiempo. Creo que
aún conservo aquel documento, como prueba de las triquiñuelas electorales
de las que hemos sido víctimas.
Para 1994 se renovó el carnet
de la Cédula y
le robaron las elecciones a José Francisco Peña Gómez, mediante el trastrueque
de nadie sabe cuántos electores a quienes se les cambió inopinadamente el lugar
de votación, incluyendo casos en que votantes fueron enviados a votar fuera de
su ciudad de residencia.
En las filas de espera la
gente dice que los funcionarios de la
JCE entregan sólo 300 boletos para aquellas personas que
llegan en busca del documento.
Se ha publicado que la
euforia de las autoridades se debe a que entregan 16 mil documentos por día, si
tomamos en cuenta que la JCE
dijo que el servicio de cedulación sólo funcionará los fines de semana,
tendríamos unas 864 mil personas ceduladas en las 54 semanas que van de este
mes a mayo del 2015.
Si la JCE entrega 16 mil cédulas
diarias, según se ha publicado, necesitarían 530 días para cubrir 8
millones 480 mil electores, hasta diciembre del 2015, cuando uno presume que
deben cerrarse los lugares de cedulación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario