EXPULSAR AL PRD DEL PRD

Por JUAN T H

Bajo la dirección de Leonel Fernández y una buena parte de la dirección del Partido de la Liberación Dominicana, Miguel Vargas pretende expulsar al Partido Revolucionario Dominicano del propio Partido Revolucionario Dominicano.

Miguel Vargas no es el PRD, ni representa al PRD. Es la antítesis del PRD y de su tradición  revolucionaria y democrática.

Cuando Miguel Vargas asegura que expulsará al ex presidente de la República Hipólito Mejía junto al cuatro veces presidente del Senado y actual presidente en funciones del PRD,  Andrés Bautista, al secretario general, Orlando Jorge Mera, hijo del fenecido ex presidente de la República, Salvador Jorge Blanco, a Geanilda Vásquez, secretaria de organización, entre otros, está pretendiendo expulsar al mismo PRD, porque ellos son el PRD.

El grupo que  Leonel Fernández quiere sacar del PRD utilizando a su Caballo de Troya. Miguel Vargas, es el que obtuvo más de dos millones de votos en las elecciones a pesar de la traición y del uso de los recursos del Estado que crearon el déficit fiscal que ronda los 200 mil millones de pesos que el pueblo tendrá que pagar con  más impuestos.

Si alguien debió ser expulsado sumariamente del PRD  por violación flagrante de los estatutos, ese es Miguel Vagas. ¡Y por alta traición!

¿Qué mayor violación a los estatutos que la firma con Leonel del “Pacto de las Corbatas Azules”, sin que ningún organismo del partido lo conociera y lo validara?

¿Qué mayor violación a los estatutos que trabajar por la candidatura del candidato del PLD, como lo ha reconocido públicamente Danilo Medina? ¿Acaso Miguel Vargas no ordenó votar por otro partido que no era el PRD?

¿Qué mayor violación a los estatutos que haberle puesto candado a la Casa Nacional para que ningún dirigente o militante que no sea súbdito, lacayo, pusilánime, empleado, chupa medias o testaferro de Miguel Vargas pueda entrar?

¿Qué mayor violación a los estatutos que secuestrar los organismos para que no se reúnan  y decidan las políticas que debe diseñar y practicar el partido?

¿Por qué Miguel Vargas no  convoca la Comisión Política, al Comité Ejecutivo Nacional y demás organismos como ordenan los estatutos? Miguel sabe que pierde en todos los escenarios. Apenas tiene un 16% de simpatías en el PRD.

¿Por qué Miguel cuando se habla unidad partidaria inventa cualquier excusa que aleja las posibilidades de un entendimiento? ¿Será porque el verdadero jefe político de Miguel, el ex presidente Leonel Fernández, se lo ordena?

Cuando Miguel habla de botar del PRD a las principales figuras del PRD, está dividiendo el partido. Sabe que lo está destrozando. Y no por torpeza, como michos piensan. Tampoco por ignorancia, como otros creen. Todo obedece a un plan. Un plan destructivo diseñado por los asesores de Leonel de cara a las elecciones de 2016.

Botar al PRD del PRD es una medida desesperada. Una provocación que busca llevar la crisis a su máxima expresión. Miguel no está solo en esa aventura. Hace tiempo que Miguel fue cooptado por Leonel, como lo hizo Balaguer con Juan Bosch. (Las traiciones en el PRD no son nuevas)

Miguel no solo está expulsando al grupo  que encabeza Hipólito Mejía. Está expulsando a Hugo Tolentino Dipp, Milagros Ortiz Bosch, Emmanuel Esquea, César Cedeño, César Sánchez, Eligio Jáquez, Vicente Sánchez Baret,  Janet Camilo, Tony Rafúl,  Víctor Méndez, Guido Gómez, Tony Peña Guaba, Jesús Ferris Iglesias, Chacho Landestoy, Héctor Guzmán, Neney Cabrera, Chú Vásquez, Alberto Atallah, Ana María Acevedo, Radamés Abreu, Fausto Ruíz, Ivelisse Prats, Eddy Olivares, Arsenio Borges,  Yadira Henríquez,  Modesto Guzmán, Manuel Durán, Pastora Méndez,  entre muchos otros en todo el país. Dirigentes con arraigo, con historia. Gente que le duele su PRD, que se ha sacrificado, que lo ha dado todo. A esa gente quiere expulsar Leonel  del PRD a través de Miguel Vargas.

Se trata de expulsar del PRD a los verdaderos dueños del PRD para destruirlo. Y eso solo puede evitarse aplicando una línea de masas contra Miguel, contra Leonel y contra el gobierno del PLD. ¡No hay otro modo!